Las varias "crisis" de La Fiesta...

Desde nuestro regreso de Madrid, estaba por escribirles sobre un tema muy de moda y que escuchamos en coloquios, charlas, condumios a los que tuvimos la oportunidad de asistir en compañia de grandes aficionados, generalmente al concluir varias corridas, donde desafortunadamente no salíamos del todo satisfechos...

Son varios los reclamos que la afición se hacía y como creo con sinceridad que varios de estos puntos son aplicables a nuestra Fiesta, así sea en proporciones mínimas, por eso quiero comentarlo hoy:

Se oía recalcar que la primera crisis la sufren los ganaderos, que pasan muchas penurias para darles el sustento y mantener sus animales, las exigencias de los controles sanitarios y todo esto se agrava por la reducçión de corridas y la preferencia de ganaderías comerciales, las cuales todos sabemos vienen de una linea del mismo encaste. Los empresarios igualmente sufren envionazos de las figuritas, que son los únicos que no se bajan de sus estrambóticas cifras y de paso están matando la gallinita de los huevos de oro. Decía un aficionado en la plaza : "además son malos profesionales al no llegar a conseguir los beneficios deseados para llenar sus arcas, por no tener consideraci;on con LOS AFICIONADOS e ignorando nuestra opinión. Somos los mas perjudicados, puesto que soportamos estoicamente el alza de los precios y nos reducen exageradamente la calidad del espectáculo". Esto fue muy claro en los últimos años en Cañaveralejo y hacemos votos porque esta próxima feria sea mucho mas acertada y positiva.

Y la reducción de la calidad del espectáculo en Madrid y en toda España se basa según los eruditos, que ha ocasionado que muchos espectadores se retiren de las plazas, se debe a lo mal que se está ejecutando el primer tercio de la lidia, la suerte de varas, la que consideran la mas fundamental de la Tauromaquia. Cuando se ejecuta se hace de manera incorrecta, con puyazos muy traseros o en el hueco de la paletilla, sin dosificar el castigo y sin picar delantero para ahormar el toro, que es su finalidad y medir su casta, fuerza y bravura. Escuché decir que los ganaderos (muchos) eran los culpables, pues se preocupan solo por el último tercio y la fase de muleta.

En varios de mis comentarios, cuando escribía sobre las corridas, nos sorprendía la falta de casta buena de la mayoría de las corridas lidiadas en San Isidro. Pues el secretario de la Organización el Toro, Don Roberto García Yuste, comenta lo siguiente : " Otro problema contra la calidad del espectáculo es la Crisis de Casta en las ganaderías de lidia actuales, una DECADENCIA APLASTANTE, que está provocando una crisis de EMOCIÖN, que hace que el público no acuda a las plazas y el que asiste, muchas veces no repite, puesto que se parece mas a una tomadura de pelo."

Otra crisis que repetían era la hay varias ganaderías en peligro de extinción, de encastes llamados "toristas", que no son bien vistos por los empresarios, "mucho menos por los toreros y tristemente por algunos espectadores, no buenos aficionados, no bien documentados".

La crisis del toreo actual. En algunos corrillos escuchamos con frecuencia que hoy se torea mejor que nunca.... esta aseveración, fue casi siempre rechazada y me comunicaban mas bien que hoy se toreaba con mas trampa, con mas ventaja, pero con menos dominio, con menos riesgo y con menos verdad. "Los aficionados no nos queremos acostumbrar a ver las figuritas, como hacen el destoreo, consistente en citar mal colocado, fuera de cacho o perfilero, para hacerlo con la muleta retrasada y después desplazar al toro largo y RECTILINEO HACIA AFUERA, descargando totalmente la suerte con la PIERNA DE SALIDA ESCONDIDA o bastante retrasada para evitar riesgos mayores"

Estas frases pueden sonar duro, pero es un hecho cierto que no podemos aceptar ni acostumbrar a ver este tipo de toreo light, este no es el que se rige por los cánones de Parar, Templar, Mandar y Cargar la Suerte, de adelante a atrás y de arriba a abajo y rematando los lances adecuadamente y sin enmendar terrenos.

Para no alargarnos mas, creo que hay que formar nuevos aficionados, que sepan de estas materias hoy aquí tratadas, para que el público sea un poco mas riguroso y menos pachanguero y pueda exigir un mejor espectáculo, en la seguridad que nuestra plaza o plazas vuelvan a colmar los tendidos.

Taurinas noches,

Tato